Contrastes intensos para efectos geométricos resueltos
La combinación de juntas oscuras y baldosas claras, o viceversa, acentúa el patrón geométrico de colocación y destaca cada pieza cerámica. Esta propuesta se presta muy bien a la colocación con motivos de espiga o chevron, en las que el patrón se convierte en un elemento decorativo. El contraste atrae la atención sobre la disposición de las baldosas y añade textura visual a los revestimientos de paredes y pavimentos.
Tono sobre tono para superficies continuas
Utilizar en las juntas un color muy similar al de las baldosas crea un efecto de continuidad visual. La superficie adquiere un aspecto uniforme y menos fragmentado, transmitiendo una sensación de mayor amplitud y apertura. Esta propuesta es ideal para interiores contemporáneos y minimalistas en los que predominan las superficies limpias y sin interrupciones. Las juntas tono sobre tono con azulejos de color gris claro o beige resaltan la calidad del material y las delicadas variaciones cromáticas de las baldosas. Este efecto de continuidad es muy eficaz con los azulejos de formato grande, que, gracias a la menor cantidad de juntas, amplifican aún más la percepción de amplitud.